Estaba a punto de llegar a una cascada, caminaba y caminaba pero cada vez que me acercaba se alejaba más, no sabia que pasaba pero estaba empeñado en seguir, era tan hermosa que me llamaba y yo iba con un furor desconocido, así pasé días enteros, intentando llegar.. De pronto me conseguí a una viejita que decía: "Nunca llegarás a esa cascada, no solo la convicción vale". Inmediatamente la perseguí, pero fue inútil porque ya había desaparecido, sin embargo seguí caminando en busca de aquella cascada que me llamaba a borbotones.
Pasaron días y la viejita volvió a aparecer, esta vez decía: Parate! y ve a tu alrededor.
Pachón omitió a la viejita, el nunca paro de caminar a su cascada, hoy se cuenta la leyenda del hombre que por no detenerse y ver que podía tocar el agua de su cascada, nunca pudo arribar a su destino.
A veces tenemos la convicción de lograr algo, pero nos cegamos y no vemos que la solución se encuentra en nuestras narices..
Escrito por joseito a las 15 de Noviembre 2004 a las 11:46 PM | TrackBackMe gusto mucho venir por aquí, como siempre :-)
Escrito por Cereza a las 15 de Noviembre 2004 a las 11:55 PMcierto, creo que tienes razon. Me recordaste el mito de sisifo, caray. A veces todo ahi, como en el alquimista, la respuesta, el tesoro en el lugar de partida.. Cuantas veces no nos habran pasado las cosas buscadas por al lado sin que las notemos..
creo q tienes razon..me ha pasado varias veces